En este artículo, te presentamos 10 plantas aromáticas para cultivar en maceta en espacios reducidos como balcones y terrazas. Aprovecha la primavera para sumergirte en el mundo de la jardinería urbana y transforma tu casa en un oasis de aroma y sabor de forma fácil y sencilla. ¡Toma nota!
Plantas aromáticas para cultivar en maceta esta primavera
Son muchas las plantas aromáticas para cultivar en maceta que podemos plantar en nuestra terraza. Sin embargo, algunas de ellas son más populares que otras gracias a la facilidad de sus cuidados y a sus amplios usos medicinales y culinarios.
1. Albahaca (Ocimum basilicum)
La albahaca, conocida científicamente como Ocimum basilicum, es una de las plantas aromáticas para cultivar en maceta más populares y apreciadas en jardines urbanos y balcones. Cultivar albahaca en maceta durante la primavera no solo es sencillo, sino que también te permite disfrutar de su frescura a solo unos pasos de tu cocina.
Características básicas
La albahaca es una hierba anual, lo que significa que completa su ciclo de vida en una sola temporada de crecimiento. Sus hojas son grandes, suaves y de un verde brillante muy característico, dispuestas en un tallo que puede alcanzar hasta 50 cm de altura. Durante el verano, puede producir pequeñas flores blancas o lilas que atraen a polinizadores como abejas y mariposas. Su aroma distintivo y dulce es lo que la hace indispensable en la cocina mediterránea, especialmente en la italiana.
Cuidados
La albahaca prefiere estar en un lugar que reciba sol directo durante al menos 6 a 8 horas al día. Si vives en un clima muy cálido, proporcionarle algo de sombra durante las horas más intensas puede ayudar a protegerla. El riego debe ser regular, manteniendo el suelo húmedo pero sin encharcarlo, ya que el exceso de agua puede promover enfermedades fúngicas.
Una maceta con buen drenaje es esencial para evitar que el agua se acumule en el fondo. Utiliza tierra para macetas de buena calidad y considera agregar un poco de compost o fertilizante orgánico al plantar para promover un crecimiento saludable. Puedes pinzar las puntas de la planta para estimular un crecimiento más frondoso y evitar que florezca antes de tiempo, ya que la floración puede disminuir la producción de hojas y alterar su sabor.
Usos principales
La albahaca es un ingrediente clave en la cocina, especialmente en platos italianos como el pesto, las ensaladas caprese, y como un aromático complemento en pizzas y pastas. Sus hojas frescas pueden ser cortadas y añadidas a los platos justo antes de servir para preservar su aroma y sabor. Además, la albahaca tiene propiedades antioxidantes y se le atribuyen beneficios para la salud, como la mejora de la digestión y la reducción del estrés.
2. Menta (Mentha spp.)
Otra de las plantas aromáticas para cultivar en maceta que no te puede faltar esta primavera es la menta. La menta, con su inconfundible aroma refrescante y vigoroso crecimiento, es una de las hierbas aromáticas más fáciles y gratificantes de cultivar en macetas durante la primavera. Pertenece al género Mentha, que incluye numerosas especies y variedades, todas compartiendo ese característico frescor que puede revitalizar cualquier bebida o plato. Ideal para decorar balcones y terrazas, la menta no solo embellece el espacio con su verde intenso, sino que también ofrece un abanico de usos culinarios y medicinales.
Características básicas
La menta es una planta perenne que puede crecer hasta 30 cm de altura, aunque algunas variedades pueden alcanzar mayores dimensiones en condiciones óptimas. Sus hojas, dispuestas en tallos cuadrados, son ovaladas, puntiagudas y de un verde profundo, con bordes serrados. La planta puede producir pequeñas flores en espigas, que varían en color desde el blanco hasta el lila, dependiendo de la especie.
Una característica distintiva de la menta es su capacidad para propagarse rápidamente mediante sus raíces subterráneas. Si bien esto es excelente para llenar un espacio, en un balcón o terraza es preferible contenerla en una maceta para evitar que se vuelva invasiva.
Cuidados
La menta es particularmente tolerante y adaptable, pero prefiere situaciones de sol parcial a pleno sol. Ama el suelo húmedo, así que el riego regular es crucial, especialmente durante los meses más cálidos. Sin embargo, como con muchas plantas aromáticas, es sensible al encharcamiento, por lo que un buen drenaje en la maceta es esencial.
Aunque es resistente y puede prosperar en una variedad de condiciones, la menta agradece un suelo rico y bien abonado. Un fertilizante equilibrado al inicio de la temporada de crecimiento puede ayudar a estimular un follaje abundante y saludable. Es recomendable podar las plantas regularmente para promover un crecimiento más compacto y frondoso, así como para evitar que se vuelvan legamosas.
Usos principales
La menta es extraordinariamente versátil en la cocina. Sus hojas frescas son un complemento refrescante para bebidas, como tés y mojitos, y pueden añadir un toque vibrante a ensaladas, postres y salsas. Además de su uso culinario, la menta tiene propiedades digestivas y se utiliza en remedios caseros para aliviar el malestar estomacal, los dolores de cabeza y el estrés.
Su aroma no solo es agradable para los humanos, también puede actuar como un repelente natural de insectos, lo que la hace una compañera ideal en cualquier espacio al aire libre. Plantar menta en tu balcón o terraza no solo te brindará un suministro constante de esta maravillosa hierba, sino que también creará un ambiente fresco y aromático para disfrutar al aire libre.
3. Cilantro (Coriandrum sativum)
El cilantro es otra de esas plantas aromáticas para cultivar en maceta que debes conocer. El cilantro, Coriandrum sativum, es una hierba anual valorada tanto por sus hojas frescas como por sus semillas (coriandro). Es un ingrediente indispensable en cocinas de todo el mundo, desde América Latina hasta Asia, por su sabor distintivo y ligeramente cítrico. Cultivar cilantro en maceta durante la primavera en tu balcón o terraza no solo te proporcionará un suministro fresco y a mano, sino que también añadirá un toque verde y aromático a tu espacio exterior.
Características básicas
El cilantro es una planta de rápido crecimiento que puede alcanzar hasta 50 cm de altura. Tiene hojas delicadas, divididas en lóbulos que varían en forma: las inferiores son más anchas y parecidas al perejil, mientras que las superiores son más delgadas y plumosas. En verano, produce pequeñas flores blancas o rosadas agrupadas en umbelas, seguidas de semillas aromáticas.
Aunque es conocido principalmente por sus hojas frescas, todas las partes del cilantro son comestibles, incluidas sus raíces, que son especialmente apreciadas en la cocina tailandesa.
Cuidados
El cilantro prefiere una exposición de sol parcial a pleno sol, pero en climas muy cálidos, la sombra parcial puede ayudar a prolongar su cosecha al evitar que la planta florezca de forma prematura, un proceso conocido como «espigado». Esta hierba ama el riego regular, pero el suelo debe drenar bien para evitar el encharcamiento y las enfermedades radiculares.
Es una planta que se adapta bien a una amplia gama de suelos, pero prospera en aquellos ricos y ligeramente húmedos. Aunque el cilantro puede ser un poco delicado para trasplantar debido a su raíz pivotante, sembrarlo directamente en macetas grandes y profundas es una excelente manera de cultivarlo en balcones y terrazas.
Usos principales
El cilantro es versátil en la cocina, utilizado fresco en ensaladas, salsas, guacamoles, y como un aromático adorno en una multitud de platos. Las semillas de cilantro, coriandro, se usan enteras o molidas como especia, aportando un sabor cálido y ligeramente picante a curries, guisos y marinados.
Además de su uso culinario, el cilantro tiene propiedades digestivas y desintoxicantes. Es rico en vitaminas A, C y K, y se cree que tiene propiedades antimicrobianas. También se utiliza en medicina tradicional para aliviar la ansiedad y el insomnio.
4. Perejil (Petroselinum crispum)
El perejil es un clásico de las plantas aromáticas para cultivar en maceta. El Petroselinum crispum es más que una simple guarnición en el plato, es una de las hierbas más versátiles y nutritivas que puedes cultivar en tu balcón o terraza. Esta planta bienal, valorada tanto por sus hojas rizadas como por las de hoja plana, no solo embellece el espacio con su vibrante color verde, sino que también ofrece una rica fuente de vitaminas y minerales. Cultivar perejil en maceta durante la primavera te asegura un suministro constante de esta hierba aromática, lista para realzar tus platos con su frescura.
Características básicas
El perejil es una planta compacta y tupida que puede alcanzar hasta 30 cm de altura. Sus hojas pueden ser rizadas o planas, siendo ambas variedades altamente aromáticas y ricas en hierro, vitaminas A, C y K, y antioxidantes. Aunque se utiliza principalmente por sus hojas, el perejil también produce pequeñas flores amarillas-verdosas en su segundo año, ya que es una planta bienal.
Cuidados
El perejil prefiere una exposición al sol parcial a plena, aunque en climas muy cálidos, beneficiará de algo de sombra durante las horas más intensas del día. Ama el suelo húmedo, pero bien drenado, por lo que es importante asegurarse de que las macetas permitan un buen drenaje para evitar el encharcamiento.
Aunque es relativamente fácil de cuidar, el perejil aprecia un suelo rico en nutrientes. Incorporar compost o un fertilizante orgánico al momento de plantar puede ayudar a promover un crecimiento saludable y vigoroso. El riego debe ser regular, manteniendo el suelo constantemente húmedo, pero sin llegar a saturarlo.
Usos principales
El perejil es un ingrediente fundamental en una multitud de cocinas alrededor del mundo. Su sabor fresco y ligeramente picante complementa perfectamente ensaladas, sopas, guisos, y salsas. La variedad de hoja plana, en particular, es un componente esencial en platos como el tabulé y en la cocina mediterránea en general.
Además de su uso culinario, el perejil tiene una larga historia de uso medicinal, aprovechando sus propiedades diuréticas y digestivas. Se ha utilizado tradicionalmente para ayudar en la digestión, y su alto contenido de vitamina C lo convierte en un excelente refuerzo inmunológico.
5. Tomillo (Thymus vulgaris)
Otra de las plantas aromáticas para cultivar en maceta que no te puede faltar esta primavera es el tomillo. Conocido científicamente como Thymus vulgaris, es una planta perenne que embellece cualquier balcón o terraza con su presencia. Con un fuerte aroma mediterráneo y pequeñas hojas verdes sobre tallos leñosos, esta hierba no solo es un deleite para los sentidos, sino que también es resistente y fácil de cuidar. Cultivar tomillo en maceta durante la primavera te permitirá tener a mano esta aromática hierba, lista para enriquecer tus platos con su característico sabor.
Características básicas
El tomillo es una planta baja y extendida que puede alcanzar hasta 30 cm de altura, ideal para cultivar en macetas. Sus pequeñas hojas verdes, a veces bordeadas de gris, están densamente agrupadas en tallos leñosos que se extienden horizontalmente. Durante los meses de verano, produce pequeñas flores rosadas o blancas que atraen a las abejas y otros polinizadores, añadiendo un toque de color a tu terraza o jardín.
Cuidados
Esta planta prefiere pleno sol y suelo bien drenado, condiciones que replican su hábitat mediterráneo natural. El tomillo es especialmente tolerante a la sequía, gracias a su capacidad para almacenar agua en sus hojas, lo que lo hace ideal para climas cálidos y secos o para aquellos jardineros que prefieren plantas de bajo mantenimiento.
Al cultivar tomillo en macetas, asegúrate de que estas tengan agujeros de drenaje adecuados para evitar el encharcamiento del suelo. Aunque es resistente y puede prosperar en suelos pobres, un poco de compost o fertilizante de liberación lenta al inicio de la temporada puede ayudar a promover un crecimiento saludable y vigoroso.
El tomillo requiere poco mantenimiento; sin embargo, podar las plantas después de que florezcan no solo ayudará a mantener su forma compacta y atractiva, sino que también estimulará el crecimiento de nuevas hojas aromáticas.
Usos principales
El tomillo es ampliamente valorado en la cocina, especialmente en la francesa, por su sabor intenso y ligeramente picante. Se utiliza en una variedad de platos, desde carnes y sopas hasta salsas y verduras asadas. Además, sus hojas se pueden secar o utilizar frescas, proporcionando versatilidad en la cocina.
Más allá de su uso culinario, el tomillo tiene propiedades antisépticas y se ha utilizado tradicionalmente en remedios caseros para aliviar afecciones respiratorias y digestivas. También se emplea en la fabricación de aceites esenciales y productos de aromaterapia, aprovechando sus beneficios relajantes y purificantes.
6. Romero (Rosmarinus officinalis)
El romero es una de las plantas aromáticas para cultivar en maceta más fáciles de cuidar. El Rosmarinus officinalis, es una hierba perenne que simboliza la resiliencia y el aroma intenso, siendo una incorporación robusta y aromática para cualquier balcón o terraza. Conocido por su resistencia y su capacidad para prosperar bajo cuidados mínimos, el romero trae consigo un pedazo del Mediterráneo a tu espacio al aire libre, ofreciendo tanto belleza visual como una multitud de usos culinarios y medicinales.
Características básicas
El romero es una planta leñosa con hojas perennes, agujas de color verde oscuro en la parte superior y plateadas por debajo, que emanan un aroma fuerte y característico cuando se frotan o se rompen. Capaz de crecer hasta 2 metros de altura en condiciones ideales, es más comúnmente cultivado en macetas como una planta compacta y manejable. Durante la primavera y el verano, produce flores pequeñas, generalmente de color azul pálido, aunque también pueden ser blancas, rosas o moradas, que atraen a abejas y mariposas.
Cuidados
El romero prefiere pleno sol y se adapta bien a una amplia gama de condiciones, incluyendo suelos pobres y secos, lo que refleja su origen mediterráneo. Esta planta ama el calor y resiste bien la sequía, gracias a su capacidad para retener agua, lo que la hace ideal para aquellos lugares con veranos cálidos y secos.
Aunque es tolerante a la sequía una vez establecido, el romero joven beneficiará de riegos regulares hasta que desarrolle un sistema de raíces fuerte. Es crucial proporcionar un buen drenaje, especialmente cuando se cultiva en macetas, para evitar el encharcamiento del suelo y prevenir enfermedades radiculares. No requiere fertilizantes frecuentes, un poco de compost o fertilizante de liberación lenta al principio de la temporada es suficiente.
Usos principales
El romero es altamente valorado en la cocina, particularmente en la gastronomía mediterránea, por su sabor único y su capacidad para complementar una variedad de platos, especialmente carnes, guisos, panes y aceites aromatizados. Sus hojas, tanto frescas como secas, son utilizadas para impartir un sabor profundo y aromático.
Más allá de sus usos culinarios, el romero tiene propiedades antioxidantes, antiinflamatorias y antimicrobianas. Se utiliza en la medicina tradicional para mejorar la memoria, aliviar dolores musculares y estimular el sistema circulatorio. También es popular en aromaterapia y productos de cuidado personal por su aroma estimulante y purificante.
7. Lavanda (Lavandula spp.)
La lavanda, perteneciente al género Lavandula, es una planta perenne famosa por sus hermosas flores y su aroma relajante. De las plantas aromáticas para cultivar en maceta, la lavanda es, quizá, una de las más interesantes, tanto por su aroma como por su belleza natural. Cultivar lavanda en macetas durante la primavera en tu balcón o terraza no solo añadirá un toque de color y fragancia a tu espacio exterior, sino que también te permitirá disfrutar de sus múltiples usos, desde la cocina hasta la aromaterapia.
Características básicas
La lavanda es reconocida por sus tallos largos y delgados que terminan en espigas de flores, las cuales pueden variar en tonos de azul, violeta, lilas hasta el blanco. Sus hojas son de color verde grisáceo, estrechas y alargadas, y toda la planta emite un aroma característico cuando se tocan sus partes. Dependiendo de la especie, la lavanda puede alcanzar alturas de hasta 1 metro, convirtiéndose en un atractivo visual significativo.
Cuidados
Esta planta ama el sol pleno y prospera en condiciones de mucha luz durante al menos 6 a 8 horas al día. Prefiere suelos bien drenados y tolera la sequía, lo que la hace ideal para aquellos que buscan plantas de bajo mantenimiento. Al cultivar lavanda en macetas, asegúrate de utilizar tierra ligera y porosa, y considera mezclar perlita o arena para mejorar el drenaje.
Aunque la lavanda es resistente y se adapta a suelos pobres, un poco de compost o fertilizante de liberación lenta al comienzo de la temporada puede ayudar a estimular un crecimiento saludable y floraciones abundantes. Riega moderadamente, permitiendo que el suelo se seque entre riegos para evitar el exceso de humedad.
La poda es importante para mantener la forma compacta de la planta y estimular el crecimiento de nuevas flores. Se recomienda podar ligeramente después de la primera floración para fomentar una segunda ronda de flores en la misma temporada.
Usos principales
Las flores de lavanda se utilizan en una amplia gama de aplicaciones, desde la creación de sacos aromáticos hasta su incorporación en recetas de cocina como infusiones, postres y platos salados, aportando un sutil toque floral. En la medicina tradicional, la lavanda es valorada por sus propiedades relajantes y se utiliza para aliviar el estrés, la ansiedad y mejorar la calidad del sueño.
Además, el aceite esencial de lavanda es un ingrediente popular en la aromaterapia y en productos de cuidado personal, reconocido por sus efectos calmantes y como un antiséptico natural. Su presencia en el jardín también puede ayudar a repeler insectos y atraer polinizadores como las abejas.
8. Cebollino (Allium schoenoprasum)
El cebollino, conocido científicamente como Allium schoenoprasum, es una planta perenne que pertenece a la familia de las cebollas, aportando no solo un delicado sabor a tus platos, sino también un atractivo visual a tu balcón o terraza con sus finas hojas verdes y flores comestibles. El cebollino es una de las plantas aromáticas para cultivar en maceta durante la primavera que necesita muy poco mantenimiento, lo que siempre facilita conseguir buenos resultados.
Características Básicas
El cebollino produce tallos delgados y tubulares que pueden crecer hasta unos 30-50 cm de altura, culminando en flores de color morado claro que atraen a abejas y otros polinizadores. Estas flores, además de ser hermosas, son completamente comestibles y ofrecen un sutil sabor que complementa muchos platos. La planta forma densos mechones, lo que la hace ideal para bordes en jardines de aromáticas o como planta focal en combinación con otras hierbas.
Cuidados
Prefiere una exposición de sol pleno a sombra parcial, con al menos 6 horas de luz solar directa al día para un crecimiento óptimo. Aunque es tolerante a diferentes tipos de suelo, el cebollino prospera en suelos húmedos, bien drenados y ricos en materia orgánica. Es importante asegurar un buen drenaje en la maceta para evitar el exceso de agua y las enfermedades radiculares.
El riego debe ser regular, manteniendo el suelo constantemente húmedo pero no encharcado. Una alimentación ligera con un fertilizante equilibrado al inicio de la temporada puede ayudar a promover un crecimiento saludable y vigoroso. Para estimular un crecimiento continuo de hojas frescas, se recomienda cortar las hojas a unos pocos centímetros del suelo y remover las flores a medida que se van marchitando.
Usos Principales
El cebollino es ampliamente utilizado en la cocina por su sabor suave, similar al de la cebolla pero menos intenso, lo que lo hace perfecto para ensaladas, sopas, cremas, y como guarnición para platos diversos.
Las flores, por otro lado, no solo embellecen el plato, sino que también añaden un toque de sabor y son excelentes en ensaladas o como decoración comestible. Además de su uso culinario, el cebollino tiene propiedades beneficiosas para la salud, incluyendo vitaminas A y C, y se cree que tiene efectos antioxidantes.
9. Orégano (Origanum vulgare)
El orégano, Origanum vulgare, es una hierba perenne fundamental en la cocina mediterránea, famosa por su aroma penetrante y su sabor intenso. Cultivar orégano en macetas durante la primavera en tu balcón o terraza no solo es fácil, sino que también te permite tener acceso a esta hierba aromática fresca, lista para elevar tus platos con un toque de sabor mediterráneo.
Características básicas
El orégano es una planta robusta y ramificada que puede crecer hasta unos 45 cm de altura, con hojas pequeñas, ovaladas y de color verde oscuro. Durante el verano, produce flores diminutas, agrupadas en espigas verticales, que varían en color desde el blanco hasta el rosa. Estas flores, además de ser decorativas, atraen a una variedad de polinizadores al jardín, beneficiando a todo tu espacio al aire libre.
Cuidados
Esta planta ama el sol pleno y prospera en condiciones de mucha luz, necesitando al menos 6 a 8 horas de luz solar directa al día. Prefiere suelos bien drenados y es tolerante a la sequía, lo que la hace ideal para aquellos que buscan hierbas de bajo mantenimiento. Al cultivar orégano en macetas, elige una mezcla de tierra ligera y asegúrate de que el contenedor permita un buen drenaje para evitar el encharcamiento.
El orégano es una planta de bajo mantenimiento que no requiere fertilización frecuente. Sin embargo, un ligero abonado al inicio de la temporada puede ayudar a estimular un crecimiento más vigoroso. Es importante podar regularmente la planta para fomentar un hábito de crecimiento más tupido y para evitar que se vuelva demasiado leñosa.
Usos principales
El orégano es mejor conocido por su uso en la cocina italiana, particularmente en platos como pizzas, pastas y salsas, donde su sabor puede realmente destacar. Sin embargo, su versatilidad se extiende a una amplia gama de cocinas, desde el griego hasta el mexicano, donde se utiliza en marinadas, guisos y más.
Además de su uso culinario, el orégano tiene propiedades antibacterianas y antiinflamatorias, y se ha utilizado tradicionalmente en remedios caseros para tratar problemas digestivos y respiratorios. También se puede secar fácilmente para su uso durante todo el año, conservando mucho de su aroma y sabor.
10. Salvia (Salvia officinalis)
La última de las plantas aromáticas para cultivar en maceta que no puede faltar en tu terraza esta primavera es la salvia. La salvia, Salvia officinalis, es una hierba perenne con profundos lazos en la historia culinaria y medicinal, conocida por sus hojas aromáticas y sus propiedades beneficiosas.
Características básicas
La salvia es una planta leñosa que puede alcanzar hasta 60 cm de altura, con hojas de color verde grisáceo, aterciopeladas al tacto, que exudan un aroma fragante cuando se frotan. Durante la primavera y el verano, produce flores en tonos de azul, púrpura o blanco, que no solo son un deleite visual, sino que también atraen a abejas y mariposas, contribuyendo a la biodiversidad de tu espacio exterior.
Cuidados
Esta planta prefiere el pleno sol, aunque puede tolerar algo de sombra ligera. Prospera en suelos bien drenados y es relativamente tolerante a la sequía una vez establecida, lo que la hace ideal para jardines en balcones y terrazas donde el riego puede ser menos frecuente. Al cultivar salvia en macetas, asegúrate de que estas tengan un buen drenaje para evitar el exceso de humedad, que puede ser perjudicial.
Aunque la salvia no es exigente con el suelo y puede crecer en condiciones pobres, beneficiará de una alimentación ligera con un fertilizante de liberación lenta al inicio de la temporada de crecimiento. La poda después de la floración no solo ayudará a mantener su forma, sino que también estimulará el crecimiento de nuevas hojas.
Usos principales
La salvia tiene una larga historia de uso en la cocina, especialmente en la italiana, donde se utiliza para dar sabor a carnes, aves y rellenos. Sus hojas pueden ser usadas frescas o secas, aunque su sabor es más intenso cuando se utilizan frescas.
Más allá de su uso culinario, la salvia tiene propiedades antisépticas y antiinflamatorias, y se ha utilizado tradicionalmente en medicina herbal para tratar dolencias digestivas y para mejorar la memoria. También se valora en la aromaterapia por su aroma relajante y purificador.
Con estas 10 plantas aromáticas para cultivar en maceta, ya estás preparado para darle vida y frescura a tu balcón o terraza esta primavera. Cada una de estas hierbas no solo añadirá belleza y aroma a tu espacio al aire libre, sino que también enriquecerá tus platos con sabores frescos y naturales. ¡Manos a la obra y a disfrutar de la primavera en tu hogar!
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